Unos cuantos años antes de que Rossini estrenara su ópera seria sobre la reina de Babilonia, otros compositores se habían ocupado de la mítica Semíramis, la reina que había gobernado la Asiria durante décadas y a la que se atribuían las murallas y los Jardines Colgantes de Babilonia, y una vida llena de todo tipo de prodigios... entre los que se cuentan su nacimiento (pues se decía que era hija de una diosa) y su muerte (pues se fue del mundo metamorfoseada en paloma). La legendaria historia de Semíramis inspiró a los compositores, y uno de ellos fue el poco conocido (hoy) Marco Portogallo, nombre por el que se conocía en Italia al lisboeta Marcos António Portugal, nacido en 1762. En 1801, Portogallo estrenó en Lisboa La morte de Semiramide, que incluía un aria de lucimiento para la soprano.
Angelica Catalani, según Elisabeth Vigée-Lebrun
Posteriormente fue revisada varias veces, hasta que en 1806 se pudo escuchar su versión definitiva, a cargo de una de las estrellas de la época, Angélica Catalani. Se cree (podemos leerlo en el libro de Susan Vandiver Nicassio Tosca's Rome: The Play and the Opera in Historical Perspective) que la Catalani pudo ser una de las figuras que inspiraron a Sardou para crear a Floria Tosca. A saber, cantó por vez primera en un convento (su padre era empleado de las monjas) y era la estrella del Teatro Argentina de Roma, igual que Floria. También era religiosa, aunque (al contrario que a la ficticia Floria) no le interesaba demasiado el drama o profundizar en los personajes, sino exhibir sus dotes naturales; por otros testimonios, parece que tampoco le interesaba demasiado la técnica o no se esforzaba en entenderla. De hecho, sus dificultades para leer música o moverse en escena eran de todos conocidas. Era una cantante sobre todo instintiva, que prefería los recitales a las representaciones operísticas, pues en una sala de conciertos no tenía que preocuparse por cómo moverse... La Semiramide que cantó en 1806 en Londres le reportó aún más fama y prestigio (convirtiéndose en una de las mejor pagadas de la época). Y, es de suponer, quedó encantada con las posibilidades que le ofrecía el aria de Portogallo. Escuchamos el recitativo y aria Sconsigliata... che fo!... Son regina, de La morte de Semiramide, en interpretación de Yvonne Kenny, acompañada por la Philharmonia Orchestra dirigida por David Parry.
video de Meyerbeer1
1 comentario:
Muito interessante Nina
Estpou a escrever sobre MArcos portugal e de facto é um extraordinário compositor
Mendo henriques
netmendo@gmail.com
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